Khaled Hosseini recupera la belleza de Afganistán, y en particular la ciudad de Kabul, en esta novela. Sigue el viaje de dos mujeres jóvenes que se ven obligadas a vivir vidas oprimidas, al tiempo que destaca su resiliencia a lo largo de sus terribles experiencias: un recordatorio del espíritu de las mujeres de Afganistán, a pesar de aquellos que intentan despojarlas de su dignidad.
El título está basado en el poema del poeta Saib Tabrizi "Kabul." En las líneas 15-16, Tabrizi escribe, "Uno no podía contar las lunas que brillan en sus tejados / Y los mil espléndidos soles que se esconden detrás de sus paredes." Su poema es Una canción de amor a la ciudad de Kabul, la misma ciudad donde Laila y Mariam forman su vínculo, y la ciudad que, mientras estragos por la guerra, tira de Laila de vuelta para ayudar a reconstruir. Es un asiento de horror con los talibanes, pero más tarde, se convierte en un símbolo de esperanza para un nuevo comienzo para Afganistán.
EJEMPLO
PINOCHO
Para su 15 cumpleaños, Mariam decide que quiere que Jalil la lleve a ver a Pinocho. Es este deseo el que cambia la atmósfera entre ellos, como Mariam llega a darse cuenta de que sus visitas semanales son todo lo que nunca tendrá de él como un padre. Se avergüenza de ella. Más tarde, Jalil espera fuera de la casa de Mariam en Kabul, pero ella se niega a verlo. Laila luego recibe lo que estaba tratando de darle a Mariam del hijo del Mullah Faizullah: una caja con una carta de disculpa, dinero y una copia de la película Pinocchio.
TÉ CHAI
Mariam comienza a ver a Laila bajo una nueva luz cuando interviene durante el golpe de Rasheed contra Mariam. Mariam dice que nadie la ha defendido antes que Laila lo hizo por ella. Su trégua lleva a Laila a pedirle a Mariam que vaya con ella a tomar una taza de chai en el patio. Mientras Mariam insiste en que tiene las tareas para que no pueda quedarse por mucho tiempo, una taza se convierte en tres, hasta que Rasheed grita por Laila que Aziza está llorando, y las dos mujeres intercambian miradas. Ya no eran enemigos.
EL BAMIYAN BUDDHAS
Los Budas fueron parte de un próspero centro budista. Están talladas en la ladera de la montaña, y tienen miles de cuevas detrás de ellos. Aquí, Laila ve el amor que Babi tiene por Mammy, a pesar de su egoísmo y su ira contra Babi por no tener "convicciones". Babi piensa en mudarse a América, y asegurarse de que Laila todavía obtiene una buena educación, pero ella sabe que nunca dejará Mammy, y Mammy nunca saldrá de Kabul. Los budas fueron destruidos por los talibanes en 2001.